Entender la minería no es difícil (si se la sabe explicar)
Informes / 08/08/2025

Entender la minería no es difícil (si se la sabe explicar)

De minería hablamos todos los días. Pero, ¿realmente entendemos de qué se trata? Triángulo del litio, RIGI, regalías, fideicomiso minero, Antofagasta, Andalgalá, MARA, Río Tinto son ideas que resuenan en los medios y en las redes y que nos vinculan a la minería, pero, en muchos casos, quedan en eso… se trata de conceptos que en forma aislada no dicen más, o, en el peor de los casos, pueden generar confusión o creencias erróneas.

No es culpa de quien lee, escucha o ve una noticia. La responsabilidad muchas veces está en cómo se informa. En general, las explicaciones no son lo suficientemente claras ni completas como para que cualquier persona —alguien que no trabaja en el sector, ni tiene tiempo para meterse de lleno en el tema— pueda comprender en detalle de qué estamos hablando.

No sorprende que se escuchen frases como: “la minería destruye todo”, “no deja nada en las comunidades”, “se llevan todo”. Son ideas que, si bien en algunos casos pueden tener un trasfondo real, no alcanzan para describir ni una mínima parte de todo un sector que está estrechamente vinculado a nosotros. El problema no es la crítica; el problema es que esa crítica surge porque se generaliza sin tener el panorama completo.

Y esto no es una defensa al sector ni un discurso de propaganda. Si no, lo que buscamos es dejar en claro que muchas veces el enojo social nace de la desinformación o, directamente, de la falta de información, lo que solo empeora la convivencia con una industria que está presente desde siempre y seguirá existiendo. Porque sí… desde el celular que usamos hasta los cubiertos con los que comemos se elaboran, en mayor o menor medida, con minerales. Incluso el cemento con el que se construyen nuestras casas, la pintura con la que las pintamos, los cables que transportan electricidad forman parte de esa cadena que muchas veces desconocemos. La minería no es solo oro, plata y litio.

Hoy más que nunca necesitamos cambiar la forma en que comunicamos sobre la minería. No alcanza con repetir que “genera empleo” o que “trae inversión”. Hace falta explicar, paso a paso, cómo funciona un proyecto, qué permisos se necesitan, qué controles hay, cómo se reparten los beneficios, qué impactos tiene y muchas otras cuestionas más. Esto se debe hacer con claridad y sin subestimar la inteligencia de quienes leen, escuchan o ven.

Porque solo comprendiendo cómo son y cómo se hacen las cosas se van los miedos y las dudas y no queda lugar para la mala interpretación. Porque es siendo honestos cómo se construye un mejor vínculo entre todos y generamos una sociedad más justa y menos agrietada.